Javier Caro

Fernando Colomo estuvo en los encuentros del Centro del Carmen de Cultura Contemporánea conducido por Rafa Maluenda. En dicha charla pudimos comprobar la cercanía y el cariño que siente Fernando Colomo por la profesión de director, juntos repasan anécdotas sobre algunas películas como El Caballero del Dragón (1985) o Bajarse al moro (1989). Además también comentaron cómo le gustaba trabajar a Berlanga.

Cuando Fernando Colomo llega al cine la censura está a punto de desaparecer, algo que fue toda una dicha para el cineasta. “Yo tengo la suerte, que no tuvo la generación anterior, que mi primera película es del año 77 y justo ahí desaparece la Censura. Antes tenías que presentar el guion, con lo cual te autocensuraban muchas veces porque decían: esto me lo van a censurar”, dice en la charla.

Fernando Colomo junto a Rafa Maluenda en Claves para el Cine (Fotografía: Javier Caro)

Junto a Colomo aparece una nueva generación de actores, Antonio Banderas, Carmen Maura, Verónica Forqué. “A pesar de mi consideración al maestro Berlanga, yo he hecho un tipo de cine distinto, más o menos comedia pero diferente porque teníamos otro planteamiento (…) yo tenía que encontrar mi generación para representar los papeles, en mi primera película, Tigres de Papel, es la primera película de Carmen Maura, había hecho cosas de televisión, un papelito muy corto en cine, pero aquí tiene por primera vez un protagonista”.

El cine de Colomo está estrechamente vinculado a ciertos actores y actrices que comenzaban a la vez que el director “Yo buscaba caras nuevas, es verdad que cuando tienes un actor muy conocido, que ha sido famoso por otras películas y lo metes en una película tuya, ya el público remite a las anteriores películas. Yo creo que siempre los directores nuevos buscábamos caras nuevas”.

Fernando Colomo nos explica sus peripecias en El Caballero del Dragón 

Nacía una nueva generación de intérpretes. “Nos inventábamos actores, unos salían mejores y otros peores, ahí está Resines, que era de producción, que tenía una moto y decía: yo llevo recaos, y dice, ahora voy a aprovechar esta rachilla que me han dado para hacer de actor y no ha parado. Es verdad que ahí hay un cambio generacional, en nuestra época no había escuelas de interpretación, pero no encontrábamos actores que pudieran dar comedia”

Os dejamos con la primera media hora de charla con Fernando Colomo